Decía Jung que ‘en nuestra ingenuidad hemos olvidado que bajo nuestro mundo de razón yace otro enterrado’. Es cuando estamos en crisis cuando se abre una maravillosa oportunidad de darnos cuenta que más allá de lo que pensamos, más allá de lo que sabemos, hay otra inteligencia que es infinitamente más poderosa que nuestra razón. En esto consiste el archiconocido lema del dejar ir. Dejarnos ir poco a poco para tomar contacto con esa otra inteligencia que guía nuestra vida. Y una vez, uno/a contacta con esa fuerza interior, entiende que no hay nada que temer. Ese camino es vivido como amenazante para la persona y requiere de paciencia, cariño y un acompañamiento amoroso de una persona que haya pasado por lo mismo. Visto de esta manera, uno está encantado de haber tenido una maravillosa vida llena de crisis porque cada una de ellas ha supuesto un paso hacia la conciencia, la sabiduría e inteligencia, la creatividad, el contacta más estrecho con el resto y el amor, que es, al fin de cuentas, la base de todo y lo que todos en el fondo anhelamos. Feliz domingo para todos/as!