A medida que vamos resolviendo nuestros conflictos emocionales vamos soltando nuestro cuerpo. A medida que dejamos de querer controlar y protegernos mentalmente, nos dejamos ir corporalmente. Si tenemos conciencia corporal nos daremos cuenta de esa maravillosa relación entre cuerpo y mente y como un cambio de pensamiento supone un cambio físico-corporal-energético. En mi opinión ya no se trata tanto de una relación bidireccional entre cuerpo-mente sino que ambas son diferentes maneras de manifestar lo mismo. Feliz dia a todos/as! David